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Las emociones son universales  e innatas en nuestra especie,   no hace falta ningún tipo de  aprendizaje para que una persona experimente y exprese en su rostro la emoción que está experimentado. No ocurre lo mismo en como la persona vive  esa emoción, esta experiencia  es subjetiva. Cada persona vive las emociones  de manera peculiar  y puede ser muy diferente a como la  experimenta otra persona , incluso la  misma persona puede vivir la misma emoción de formas muy diferentes. Fijemonos en el miedo, podríamos pensar que es una emoción que nos resulta desagradable pero la realidad es que muchas personas pagan dinero por ir al cine y experimentar esa emoción, la clave está en   cómo valoremos subjetivamente la emoción. Es la interpretación lo que da lugar a la experiencia subjetiva de cada emoción.

Schacter y Jerome Singer (1962) demostraron como nuestra experiencia emocional esta influida por la interpretación que hacemos sobre la  excitación fisiológica. Schater y Singer inyectaron adrenalina en dos grupos de personas; el primer grupo se le informaba de la posible reacción que podía tener la inyección, en el segundo grupo se les indicó que la inyección era inocua y no generaría ninguna sensación. Después se pasaba a los sujetos a una sala de espera donde se encontraban con un cómplice de los investigadores que fingía una actitud eufórica o irritada. Los resultados mostraron que cuando las personas eran informadas de la posible excitación que producía la droga atribuían su excitación a la droga y no generaban ninguna experiencia emocional, sin embargo en el otro grupo actuaron “imitando” la emoción evidente (felicidad o irritación) de la persona con la que estaban. La teoría bifactorial de Schachter da a entender que necesitamos catalogar nuestra excitación para que aparezca la experiencia emocional, así necesitaríasmos dos factores para comprender la emoción: la excitación y la interpretación de esa excitación. Lea Componentes de las emociones: la respuesta fisiológica.

En otra linea de investigación Robert Zajonc (1980) sostiene que parte de nuestras reacciones emocionales son más rápidas que las interpretaciones conscientes por lo que podrían aparecer emociones sin necesidad de un procesamiento cognitivo. Para Zanjoc el afecto es lo primero en surgir y va a influir en el proceso cognitivo .

La interpretación que se hace de la emoción puede ser un factor de mantenimiento en algunos de los trastornos psicológicos. Un ejemplo de como se puede entrar en un circulo en el que los pensamientos (cognición) y las emociones lo podemos observar en el trastorno de pánico, en el que las respuestas fisiológicas de la ansiedad se interpretan de una forma catastrófica y dramática y esa interpretación aumenta y mantiene las respuestas fisicas del miedo, generando así un aumento o mantenimiento de los síntomas.

En el trastorno de pánico las interpretaciones sobre las sensaciones aumentan el pánico .  

También podemos experimentar formas combinadas de varias emociones. Ante una primera cita con alguien que nos gusta  podemos experimentar cierto grado de miedo acompañado de alegría e interés. Así, la excitación proveniente de una emoción puede pasar a otra emoción o sentimiento. Voy a ilustrar este fenómeno con el simpático experimento que realizaron Donald Dutton y Arthur Aron ( 1974), en el que una mujer atractiva abordaba a hombres que cruzaban dos puentes diferentes sobre el rio Capilano en la Columbia Británica Canadiense. La mujer les preguntaba si les gustaría participar en un experimento científico, simplemente consistía en ir hasta la mitad del puente y dejarse inspirar por la belleza de los alrededores y después plasmar su impresión en una historia o un dibujo. Uno de los puentes era un puente solido y con una baja altura, el otro era un puente colgante con una distancia de 137 metros y a una altura de setenta metros sobre el rio rocoso. Cuando los participantes volvían la experimentadora les facilito su teléfono por si querían saber algo más sobre los resultados del experimento. Un número mucho más elevado de hombres que atravesaron el puente más emocionante aceptaron el teléfono y llamaron posteriormente. La excitación que experimentaron al pasar por el puente colgante se traslado a la atracción que sentían por la experimentadora.

No cabe duda de la gran excitación que deben experimentar los 800.000 visitantes que cruzan anualmente el Capilano Canyon Suspension Bridge